#NoMoreMatildas es una iniciativa que busca subsanar esa injusticia del pasado, pensando también en el futuro.
Es probable que si Einstein, Schrödinger o Fleming hubieran sido mujeres, esos nombres apenas nos sonarían hoy, porque los méritos de sus descubrimientos hubieran sido para algún compañero de investigación. Puede que incluso para sus maridos. El ‘efecto Matilda’ es ese fenómeno por el que los hallazgos de las mujeres científicas han quedado relegados, de forma sistemática, al olvido de la historia. Hildegarda de Bingen, Nettie Stevens, Lise Meitner, Marietta Blau o Rosalind Franklin son algunos ejemplos.
#NoMoreMatildas es una iniciativa que busca subsanar esa injusticia del pasado, pensando también en el futuro. Es una idea de Gettingbetter Creative Studio para la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas (AMIT). Todo surgió de una manera bastante espontánea cuando el equipo de Gettingbetter, una pequeña agencia de Alicante, oyó hablar por primera vez de ese ‘efecto Matilda’. “Cuando nos enteramos de que existía nos despertó cierta curiosidad, empezamos a investigar y descubrimos que está documentado y reconocido desde hace casi treinta años”, explica Lucía de la Vega, directora ejecutiva de la agencia. “Es como si la desaparición de estas mujeres y sus logros se hubiera aceptado socialmente sin reparar en sus daños y consecuencias no solo sobre la historia, sino también sobre nuestro presente y nuestro futuro”.